El conocimiento también es un gran capital.

Ningún límite de riqueza está fijado a los hombres. (Solón)
 
 

No se confunda, educación no es igual o sinónimo de conocimiento financiero, económico, matemático, físico, químico o de cualquier otra ciencia de conocimiento específico y concreto. La enseñanza colectiva considerando que todos los alumnos son iguales no parece que sea lo más adecuado. Ya tiempo muy atrás estaban separados en aulas distintas y también distintos los temas así como el grado de su contenido. Una niña (se dice así o mejor utilizar cría) de edad cronológica 12 años tiene biológicamente por su desarrollo genético más madurez y grado de entendimiento y comprensión que un niño (se dice así o mejor decir crío) de la misma edad. En mí dilatada experiencia como docente lo he podido verificar y concluir que este sistema no funciona, o por lo menos no funciona como tendría que hacerlo. Si ponemos el nivel a la altura que sea para la una, el otro no se entera porque va siempre retrasado ya que no lo entiende bien. Lo que no se entiende no se comprende y si no se comprende no se puede reflexionar y concluir lo necesario como concreto para archivar y luego recordar. Recordar es saber para poderse expresar y obrar. La una aprobará e incluso hasta un 8 sobre 10 y el pobre del otro, un poco tontito o disminuido, apenas aprobaría, por lo que al menos se le pone un 5. Si los dos son de los mismos padres o “progenitores” (se dice así o según la ministra son hijos del Estado) y los críos van al mismo colegio, resulta de forma contundente que la una es muy lista y el otro es un poco tonto, disminuido o no es aplicado, con lo que socialmente ya queda lastrado, al menos por el momento, hasta que con unos años más las cosas se vayan igualando e incluso, muy probablemente, superando.

Biológicamente, y con carácter casi general, los unos no puede evitar la mirada de observación de instinto respecto al disimulo de las otras, por lo que insistir en igualar por ley de la autoridad conferida lo que es desigual, biológico y antropológico incluso social ancestralmente asumido como normal, es una tontería real y muy perniciosa para una sociedad que necesita procrear para subsistir y progresar. Viendo con detenimiento las pirámides poblacionales de las ciudades de España se deduce, con cierta aproximación, que uno de los negocios más lucrativos pudieran ser las funerarias y no precisamente las guarderías ni los colegios. Es posible que en España se pierdan más de diez millones de población de aquí a 25 o 30 años.

Hoy en los colegios se inocula “educación” normalmente ideológica sesgada respecto a la política de izquierdas e igualitaria con sesgo muy acusado hacia la tendencia cada vez más insistente del feminismo impositivo, acosta de la degradación persistente de los varones a los que se les acosa de forma vergonzosa, además ya no existen conceptos como los principios y valores, tampoco el interés y la predisposición a la colaboración mutua, ni la constancia permanente por superarse y la inteligencia natural es anulada al no servir para nada. Sin más, el niño prodigio es un facha. Insistir en tomar sexo y género como convenga a la ideología política de izquierdas, para igualar a todos por abajo, es claramente pernicioso para la sociedad en su conjunto. Por mucho que insistan, nunca jamás en la vida real se podrá igualar lo que biológicamente, antropológicamente y socialmente es radicalmente desigual. En el decir e imponer por la autoridad conferida del poder omnímodo, por mucho que se insista, no es suficiente para modificar la biología genérica del mundo animal de macho y hembra. En un corral en el que haya gallos y gallinas no parece posible conseguir que los gallos sean obligados por decreto de los amos a que tengan que poner huevos como las gallinas, o que las gallinas tengan que hacer la función de los gallos. Posiblemente esté yendo muy lejos, pero al menos puede que sea referencia tener que pensar de forma lógica, sensata y real posible para cada caso en cuestión, ya que de lo contrario más adelante habrá que volver las cosas a su sitio. En mi libro El Principio Universal del Módulo de Elliott (primera edición abril de 2001) tengo demostrado científicamente, de forma irrefutable y definitiva, el gran error que cometió el matemático Fibonacci por no saber hacer el inicio del conteo, desde el primer mes de vida para aparecer el inicio de la fertilidad, del ciclo biológico de reproducción en los conejos. Es más, aún se sigue explicando con este horroroso error en todos los niveles correspondientes de la enseñanza, incluida la carrera de matemáticas, con lo que repitiendo muchas veces una mentira termina por asumirse como verdad, pero no por eso deja de seguir siendo una vergonzosa y denigrante estafa en la docencia. Enseñar lo que no existe es cada vez más común en estos tiempos y en los venideros aún peor. Las realidades son una sola cosa, pero si se cambia el nombre sepa que se cambia la cosa y pasa a ser verdad única, aunque la cosa siga siendo realmente la misma cosa. Cambiar conscientemente la naturaleza y razón de ser de una cosa, o de lo que sea, para que se borre la etimología de siempre y se entienda lo que al poder le interesa, puede que sea perversión en grado sumo.

Lo más cuerdo y necesario, en lógica básica aplicada, sería que a la hora de considerar la formación genérica se impartieran los conocimientos específicos y concretos para que salgan los alumnos preparados en las distintas ramas o especialidades del saber teórico y práctico, para luego poderlo aplicar en las distintas ciencias básicas de hoy y futuras. Así, desde estos principios y su desarrollo, podrán proyectarse hacia la conquista de unos objetivos que le puedan proporcionar soluciones para su mejor vida posible en el día de mañana. Aprender para saber, saber para recordar y recordar para aplicar y conquistar el fruto de retorno positivo que cada uno sea capaz de alcanzar en el desarrollo de su vida en libertad y necesaria competencia. No hay más remedio que asumir esa frase de “La verbena de la Paloma”, que aunque parezca antigua (estrenada en el Apolo en febrero de 1894), seguirá de actualidad: “Hoy, las ciencias adelantan que es una barbaridad” ¿Es razonable que la nota de la evaluación sea el agregado del comportamiento en clase y del conocimiento del contenido de las asignaturas? El agregado 3 en comportamiento y 2 en conocimiento da el resultado 5 y el concepto global es aprobado. ¿Es lo mismo comportamiento que conocimiento? Pues no, pero los padres contentos porque lo que quieren es que los críos (antes los hijos) aprueben, sin querer entender que comportamiento no es lo mismo y ni siquiera parecido a conocimiento, ya que sus características no son comunes referidas a su naturaleza, por lo que no permite establecer una relación de semejanza y uniformidad. La educación para un buen comportamiento de la persona se da por supuesto y viene principalmente de casa, incluso con principios y valores personales, pero al conocimiento no se le puede agregar el comportamiento porque no son conceptos homogéneos. Calificar así, tal y como se hace incluso en colegios concertados, es una auténtica aberración. Además, ¿cómo es posible que al final apenas haya suspensos, incluso terminen pasando todos de curso? Ya han perdido este curso 19/20 y van a perder también el 20/21, ya que, ¿con qué garantías van a poder aprovecharlo si varias asignaturas se las han aprobado sin haberlas dado ni recibido? ¿Es justo que si no han dado todos los temas de una asignatura, la que sea, se la aprueben?

No hay nada más torcido que la injusticia consciente

El concepto que nadie se quede atrás es un efecto rebaño, es un concepto de ganado estabulado medido por el número de cabezas que compone el rebaño, cuyo propietario es el ganadero, o sea, el Gobierno, porque ya no existe la Nación ni tampoco el Estado de Derecho. Ahora es todo torcido al ser los políticos los únicos que tienen acaparados todos los poderes, por eso se ocupan de que los pueblos estén compuestos por colectivos de entes amorfos, en versión ganado lanar, que pastarán en la hierba del prado. En una sociedad no es posible que todos sean iguales. Por principio primero y principal de una sociedad, el concepto igualdad no existe, salvo en la pobreza o en la miseria. Todo lo que se haga por los poderes conferidos indecentes para igualar por abajo es anular la iniciativa de la libertad de obrar así como también prohibir la necesaria e imprescindible competencia, que es donde realmente está la posibilidad de generar riqueza por aquellos más decididos que tienen sus ideas y exponen su dinero. Por lo tanto, la igualdad mal entendida es perniciosa porque anula la posibilidad de aprender sin límite lo que cada uno sea capaz de asimilar para luego recordar y aplicar por medio de la imaginación, la creatividad y la capacidad de obrar para progresar en lícita competencia.

Puede que sea así o muy parecido:
Si acuerdan juntarse uno que bien manda y otros que bien obedecen y hacen,
el resultado suele ser una buena obra en común.

No hay peor ruina personal que la prisión de la ignorancia.

El freno real es moral y está por encima del freno legal.
Los principios y valores son imprescindibles en los pueblos y en los gobernantes,
de lo contrario se avecina un crepúsculo tenebroso.

La frase que más adelante sigue está, y ahí sigue y seguro que continuará, escrita en la pared de una fábrica en el pueblo Valencia de Don Juan (León): “Los ricos no pueden vivir sin los pobres”. Me parece que la expresión es revolucionaria, demagógica y arcaica, pero entiendo que posiblemente tenga su antagonismo en “los pobres no pueden vivir sin los ricos”. Otra frase muy conocida por aireada es “la tierra es para el que la trabaja”. Cuál sería la solución, ¿todos ricos o todos pobres? ¿A Ud. le encantaría estar metido de lleno en la masa amorfa y resignada de los pobres y caminando hacia la miseria o prefiere doblar el espinazo para ganarse el sustento como lo hacen los pájaros? Cada persona tiene la obligación de intentar resolver su vida de la mejor manera que le sea posible a través de la igualdad de oportunidades para todos. He escrito y Ud. ha leído igualdad de oportunidades para todos, pero no de derechos para unos y que las obligaciones sean para otros. Que yo sepa, a ningún pájaro le llevan la comida al nido. Como norma bastante general, primero están las obligaciones y más tarde la posibilidad de los derechos. También, que yo sepa, en la vida realmente vivida de una persona normal casi todo son obligaciones desde una tierna infancia. Ya es historia que no se quiere recordar eso de ganarás el pan con el sudor de tu frente. Pero cada vez más las generaciones actuales prefieren recibir regalado el pan conseguido con el sudor de la frente del de enfrente. Estamos, y cada vez más, en la idea perniciosa de apañarse con la limosna de la subvención y no doblar el espinazo. Sin formación y libertad para ejercer la posibilidad de obrar en libre competencia, no hay progreso para nadie. Un país de parados y pedigüeños suele terminar viviendo en la pobreza y hasta posiblemente consiga la miseria.

Se tendría que considerar una evidencia que en la vida real todas las cosas tendrían que valorarse por su función y sus resultados contrastados.
Si dicen que la virtud de la justicia es el discernimiento de lo justo, ¿por qué tan regularmente es injusta?
¿Es justicia la conveniencia del poderoso?
Ningún límite de riqueza está fijado a los hombres. (Solón)
En la obra de Hesíodo “Los trabajos y los días”:
“En primer lugar, procúrate casa, mujer y buey de trabajo”. 

Una masa fermentada enardecida puesta en movimiento, en respuesta al yugo y la opresión asfixiante de un déspota, es como una gigantesca apisonadora que por donde pasa todo lo lamina.
Los Gobiernos teocráticos utilizan la propaganda demagógica orquestada como carnaza para que sirva de alimento populista con el que engatusar a las masas amorfas.
¿El asunto de la democracia real aún sigue pendiente?

  ¿Qué tipo de gobernanza diría Ud. que es la que considera que son las personas un producto de usar y tirar? Sabiendo lo que ya vivió y lo que está viendo y padeciendo así como lo que le queda que acarrear y soportar, ¿se atrevería a contradecir el contenido de las frases contra la democracia de Aristóteles, de Platón, de Plutarco, de Esopo, de Diógenes, de Víctor Hugo y de otros muchos? Las tiene en internet y yo le indico algunas de los tres primeros:

De Aristóteles: “La peor forma de desigualdad es tratar de hacer que las cosas desiguales sean iguales. Las Polis degenerarán en democracias y las democracias degenerarán en despotismos. Esta y no otra es la raíz de donde surge el tirano; cuando él aparece como un protector”.

De Platón: “El verdadero destructor de las libertades del pueblo es aquél que le reparte regalos, donaciones y beneficios”.

De Plutarco: “La democracia es un dispositivo para asegurar que no seamos gobernados mejor de lo que nos merecemos”.

Debiera ser una evidencia el ocuparse de todo lo que tenemos que hacer y podemos, y no de lo que nos gustaría. No es lo mismo comer con el paladar que comer por necesidad. Si tomara como referencia la vida ejemplar de democracia que ejerció Pericles, la Política de Aristóteles y La República de Platón no le iría mal para adquirir un poco de conocimiento para entender gran parte de las cosas que está viviendo y que le quedan por vivir y padecer mientras esté en esta vida. No olvide nunca que lo que hay en el plato es fruto de haber doblado antes el espinazo. O dicho de otra manera: Para llenar el capazo, antes hay que haber doblado el espinazo. Procure no olvidarlo.


Antonio Sáez del Castillo

Agosto de 2020

Volver a los artículos